Me siento como Carrie Bradshaw escribiendo a las cinco y media de la mañana desde su portátil sus reflexiones. Tenía muchas ilusiones en este sábado porque los fines de semana se han convertido en mi válvula de escape. En mi forma de asumir todo lo que ocurre a mi alrededor y de canalizar todo el estrés que conllevan mis semanas.
Cuando tengo un día duro pienso: bueno, todo esto lo quemo yo en el finde. Me hace olvidarme, pasármelo genial con los míos y coger fuerzas para la semana que entra.
Ha sido un sábado entrañable: so-la-men-te puedo decir: Gracias por venir!!
( a tutti)
Besos marinos